M. Enrique V. Iglesias: Los Desafios de la Crisis.

Papa analizar la actual crisis económica hay que pensar en Los desafíos que tiene por delante nuestro mundo de hoy, un mundo marcado por fuertes contradicciones y por una creciente inseguridad.

La contradicción más evidente aparece cuando observamos, por un lado, los grandes progresos de la humanidad en las últimas décadas, y por otro, los grandes déficits politicos y sociales no resueltos.

Entre los grandes logros está el vigoroso crecimiento económico de los últimos años ; crécimiento que, en algún caso –y estoy pensando en China – ha supuesto la superacion de lacras historicas como la hambruna y la pobreza.

Tambien América Latina ha demostrado estos últimos años su capacidad de crecimiento y reducido su pobreza del 45 al 35 por ciento en un quinquenio.

Pero junto a los logros tenemos que reconocer que, a nivel mundial, la pobreza sigue siendo dramática. Como dramaticos son la exclusión, la desigualdad y el desempleo, que hoy castiga a más del 50 % de la poblacion mundial.

Vivimos en un mundo más inseguro debido a la destrucción del medio ambiente, a la amenaza creciente del cambio climático, a las armas de destrucción masiva, al terrorismo internacional, al crimen organizado o al dramático impacto que en América Latina tiene el tráfico de drogas.

Sobre estas realidades aparece una crisis financiera y éconómica inédita, imprevisible y resistente a las medicinas tradicionales.

Es diffícil predecir cuándo y cómo la superaremos. Pero si sabemos que se superará y que el mundo que viene y no volverá a ser el mismo, asi que intentemos identificar algunas grandes tendencias.

1) Una nueva geografia del poder económico y político del mundo.

La irrupción en el escenario económico de los paises emergentes es una realidad creciente e irreversible en la distribución del poder financiero, económico y comercial. En su momento, quizá también lo sea en el poder militar.

Hoy no es posible concebir una nueva estructura financiera internacional sin contar con paises como China, India, Rusia, Brasil, México o Sudáfrica. Estos paises no han originado la crisis pero ayudarán a salir de ella. Como América Latina, que no ha sido responsable de este desastre pero contribuirá a superarlo mediante su capacidad económica, financiera y comercial.

2) Una nueva arquitectura financiera internacional

Desde la crisis financiera de los años 90 empezamos a reclamar una nueva arquitectura financiera internacional. La naturaleza de la crisis actual y su gravedad ya han movilizando la voluntad politicá des G-20 para trabajar en esta direccion.

3) ¿ Habrá más proteccionismo o se avanzará hacia un nuevo orden comercial mundial más equitativo ?

La historia demustra que en las grandes crisis baja el comercio y crece el desempleo. La tentación de caer en los proteccionismos, tanto comerciales como financieros, se hace en ocasiones par los Gobiernos algo irrestible. Pero la historia demuestra tambien que esos proteccionismos, a la larga, no sólo no protegen sino que generan más problemas de los que pretenden resolver.

En Américas Latina, esta tentación tambien estará presente.

Deberemos ampliar consultas y pedir la cooperación de los sectores públicos y privados para mantener los logros del consumo regional de los últimos años.

4) Más estado y más politicas públicas en los procesos económicos.

Esta tendencia, que ya fue claramente perceptible durante el reciente salvataje de los sistemas financieros privados también se nota en la orientación a la que parece dirigirse la nueva arquitectura financiera internacional.

Y si algo debe protegerse en este priodo de crisis y transición hacia una nueva economica son los logros de los últimos anos en la región : la estabilidad económica y las ganacias sociales. Ambas tareas reclamarán más y mejor Estado. Más y mejores politicas públicas.

5) Cambios en los modelos de negocios.

La globalizaión comercial y de inversión de las últimas décadas y los avances imparables de la tecnolgía y la innovación han producido importantes cambios en las estructuras de las empresas y en el modelo de negocios.

Las neuvas prioridades en la agenda pública tendrán importantes implicciones sobre las inversiones privadas. La lucha contra el deterioro ambiental o el cambio climático, las nuevas aplicationes de la biotecnolgía o la nanotecnología, las nuevas formas de produccion agroindustrial …todo ello està expuesto a grandes transformciones que tendrán impicación sobre los modelos de negocios y la estructura de las empresas.

Esta nueva orientacion también tendrá sus efectos sobre las industrias de servicios como la innovación en la educatión, la salud, o la propia calidad de vida en el campo o en las ciudades. Son innovaciones que abren muchas posiblidades al sector privado.


Apuntadas estas grandes tendencias, no debemos olvidar que todas las crisis han tenido impactos inevitables sobre la sociedad y sobre la política. Recordemos las turbulencias sociales y politicas de los años 30 y el drama de la Segunda Guerra Mundial.

La crisis actual ya tiene un fuerte impacto sobre la sociedad y la politica, sobre todo debido al desempleo y a la destrucción de pequeñas y mediañas empresas. Por desgracia, son las jóvenes generaciones las que más sufren las crisis en la medida en que se restringen sus oportunidades de trabajo y empleo.

Los Gobienrnos están procurando responder a la pérdida de dinamismo de la economia aumentando el consumo público e interviniendo en el gasto fiscal.

En todo caso, lo que podemos anticipar es que necesitaremos mejor Estado y mejor mercado.

El creciente rechazo a lo financiero y en especial, a los bancos y a las bolsas es comprensible si se analizan los costes tanto individuales como sociales de la crisis actual. La regulación que se anticipa y la mayor presencia de la banca publica ayudarán a recuperar una confianza en el sistema financiero que es fundamental par el funcionamiento de los mercados, el flujo des crédio y el financiemento de la inversión.

Recordemos, en fin, que el capitalismo de hoy ha olvidad alguno de los principios éticos y solidarios que formuló el mismisimo Adam Smith, quien enseñaba Moral antes de enseñar Economíca. La violación de esos principios reclama hoy la vuelta a los orígenes del sistema de mercado. Asi, y sólo así, saldremos fortalecidos de la crisis.

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